La higiene bucodental es una de las actividades de la vida diaria básicas en nuestro día a día. Además de ser una actividad de gran relevancia en nuestro salud general.
En relación, a los pacientes neurológicos, la higiene oral cumple un papel primordial. Ya que en un alto porcentaje de casos de personas que sufren un daño cerebral o una enfermedad neurodegenerativa presentan dificultades para realizar o mantener de forma correcta una higiene oral. Debido a la presencia de déficits a nivel cognitivo y/o motor que hacen que la persona desempeñe la tarea de forma incorrecta. O precise de ayuda de una tercera persona para realizar dicha actividad bien por incapacidad motora o por no saber como hacerlo.
Lo que da lugar a índices de placa bacteriana elevados que hacen que sus dientes y encías sean más susceptibles a afectaciones odontológicas (caríes, sarro, enfermedad periodontal, etc.).
¿Y cómo realizar la higiene oral en enfermos neurológicos?
A la hora de llevar a cabo la higiene oral en un paciente neurológico se debe tener en cuenta las características individuales según cada situación. No obstante, hay una serie de aspectos que se deben tener en cuenta para realizar una adecuada higiene bucal entre los cuales deben destacar:
- Explicar a la persona la actividad que se va a realizar y pedir que colabore. Siempre y cuando sea posible realizar la tarea en sedestación o con el cuerpo semi-incorporado.
- Cepillar cara externa e interna, superior e inferior de los dientes, muelas y lengua.
- Facilitar un vaso con agua para realizar el enjuague. Y posteriormente, realizar el mismo procedimiento con el colutorio.
- Secar y aplicar bálsamo hidratante en labios.
En aquellos casos en los cuales el nivel de conciencia o afectación no permitan seguir el procedimiento descrito con anterioridad se debe:
- Posicionar al enfermo en decúbito lateral.
- Emplear una gasa enrollada en un depresor lingual e impregnarla en la solución antiséptica. A continuación, limpiar el interior de la boca con suavidad para evitar lesiones, irritaciones o maniobras que provoquen nauseas.
- Realizar el mismo procedimiento con la gasa empapada en agua para realizar el enjuague.
- Secar y aplicar bálsamo hidratante en labios.
Motivo por el cual, es necesaria la concienciación sobre la importancia de la salud oral en enfermos con patologías neurológicas. Ya que esto no solo nos permite mantener una adecuada salud dental. Sino también evitar otro tipo de patologías asociadas como la neumonía por aspiración, bruxismo, etc.
Consejos que se pueden tener en cuenta:
- Realizar la higiene bucodental completa (dientes, lengua, techo del paladar y labios) tras cada comida. Como mínimo dos veces al día, siendo primordial por la noche.
- Emplear un cepillo de dientes eléctrico o adaptado a la cavidad bucal y situación funcional de la persona. De tal forma, que permita la limpieza completa de todas las piezas dentales.
- En caso de prótesis dental realizar una adecuada limpieza de la misma. Para ello, retirarla, limpiarla y desinfectarla de forma adecuada.
- En personas con demencia se debe tener en cuenta que a medida que la enfermedad avance la persona tendrá mayor dificultad para realizar la higiene oral. Por ello, es importante:
- Mantener hábitos diarios de higiene bucodental.
- Supervisar la tarea siempre y cuando ésta no se realice de forma correcta.
- Respetar el “tiempo” de la persona, permitiendo que ésta realice la higiene bucodental en el ritmo que precisa.
- En caso de que la persona precise ayuda de una tercera persona para realizar la higiene oral, explicar de forma simple la tarea a realizar.
- En enfermos que presenten conductas de rechazo ante la higiene oral buscar ayuda profesional (logopeda o terapeuta ocupacional con formación en neurología). De tal forma, que se pueda determinar las causas por las cuales la persona evita la higiene oral:
- Alteraciones sensitivas y/o perceptivas.
- Alteraciones motoras.
- Dolor.
- Dificultades comprensivas para comprender la tarea que se va a realizar.
- Etc.
- En enfermos con imposibilidad de eliminar los excesos de pasta después del cepillado o colutorio emplear gasas a modo de torunda.
- Se recomienda el uso de un limpia lenguas para eliminar la suciedad de la lengua de dentro a fuera.
- Y por último, y más importante se recomienda el seguimiento y control por parte de un servicio de odontología neurológica.